Published by Rubén Vinagre Sáenz
28/07/2009
David Simon estaba convencido de que una serie de televisión sobre traficantes, delincuentes, políticos y policías en Baltimore tenía que meter al equipo de rodaje en los barrios bajos de esa ciudad si quería ser realista. Los despachos de los políticos y las comisarías de policía se podían reproducir en un estudio, pero ni el mejor presupuesto podría nunca imitar en cartón piedra algo que distingue a Baltimore en particular: la calle.